Galeno, el famoso médico griego, usaba el jengibre como medicamento para corregir los tumores, defectos del cuerpo y en tratamientos de parálisis. Avicena, prestigioso médico persa, lo recomendaba como afrodisíaco, altamente beneficioso en el tratamiento de la «debilidad sexual».
Estos y otros muchos beneficios tiene este rizoma subterráneo, que además aporta un sabor picante y único a muchas recetas.
El jengibre (Zingiber officinale) -como venía diciendo- es un rizoma subterráneo de una atractiva planta de flor, usado frecuentemente en las cocinas de origen asiático y cultivado en Asia Tropical desde hace más de 3.000 años, aunque crece en todas las regiones tropicales del mundo. Fue empleado en Oriente Medio y en el Sur de Europa mucho antes de la época romana. Los portugueses lo introdujeron en África y los españoles lo llevaron a la Antillas de manera que en el S.XVI España tenía un florenciente comercio de jengibre en Jamaica con el resto de Europa.
Para escoger rizomas frescos, debemos fijarnos en el peso y la carne firme, que son signos de frescura. La longitud es señal de madurez; los rizomas maduros serán más picantes y más fibrosos.
Para preparar jengibre fresco rallado, primero hay que pelarlo. Se debe usar el rallador especial al que he aludido anteriormente, que no tiene agujeros como el tradicional nuestro. De ese modo, tal como se ralla se va formando una maraña de fibras que finalmente recogeremos entre nuestros dedos delicadamente y exprimiremos cerrando la maraña de fibra entre nuestro puño, de manera que saldrá un chorro líquido color amarillo fuerte, que podemos derramar sobre infusiones y guisos para su uso. El jengibre fresco rallado se conserva alrededor de una semana en lugar fresco. En la nevera, se puede conservar varias semanas envuelto en papel de cocina para absober la humedad y metido en una bolsa de plástico.
Las mismas fibras que componen el jengibre pueden suponer un problema a la hora de cortarlo a rodajas, si es la opción que elejimos para usarlo como ingrediente.
El jengibre seco molido no tiene el sabor del fresco y no se pueden intercambiar en las recetas; el molido es mejor para platos dulces (galletas, panes, pasteles…).
Beneficios del jengibre
El jengibre tiene muchas propiedades medicinales: es antiespasmódico, antiséptico, antiviral, expectorante y estimulante del sistema circulatorio. Incluso, como agente anticoagulante en la sangre. Se puede tomar como té o como ingrediente de muchas recetas, tanto fresco, como seco, encurtido, confitado en jarabe y cristalizado. Los japoneses, que utilizan principalmente el jengibre encurtido rosado para condimentar el sushi, tienen incluso una herramienta especial (oroshigane) que se reserva para rallar el jengibre fresco.
- Calienta el cuerpo. En los días de frío, esos en los que no consigues calentarte desde dentro, añade jengibre a tus infusiones y a tus guisos. Una de sus más apreciadas características es que saca el frío del cuerpo y mantiene el calor.
- Regula el metabolismo. El consumo de jengibre facilita la absorción de los nutrientes de los alimentos, encargándose de que los compuestos esenciales lleguen a donde deben. Además, si tienes falta de apetito un poco de jengibre fresco antes del almuerzo puede ayudarte a «hacer» hambre.
- Alivia el mareo y los vómitos. Prepara una mezcla de jengibre con un poco de miel, o bien una infusión. Mejorarán tus mareos, por problemas al viajar, si estás embarazada, o por los efectos secundarios de la quimioterapia.
- Disminuye el dolor en las articulaciones. El jengibre tiene propiedades antiinflamatorias, que pueden aliviar al dolor de las articulaciones. Un baño con agua de jengibre ayuda a disminuir estos dolores musculares.
- Calma la congestión. Prepara un té de jengibre y métete en la cama. Verás cómo combates la congestión que produce la gripe o el dolor de garganta. Además, dormirás como un bebé. 😉 Si no puedes acostarte porque no puedes respirar, coge un trozo de raíz y máscalo, extrayendo su jugo. Tu garganta mejorará notablemente y tu nariz aliviará su obturación.
- Contra el asma. Una cucharadita de jugo de jengibre con un poco de miel actúa como expectorante. Es una de las propiedades del jengibre más utilizada. Además, se ha comprobado que tiene efectos favorables para aliviar el asma.
- Contra la depresión. Por su contenido en capsaicina, aumenta la moral porque produce endorfinas, las conocidas «hormonas de la felicidad».
- Otros beneficios del jengibre. Se recomienda en el tratamiento de cataratas, enfermedades del corazón, migrañas, mal aliento, diarrea, problemas cardiovasculares, infertilidad, cálculos renales, angina de pecho y pie de atleta, entre muchos otros casos.
- Un aviso importante: En la cocción se pierde parte de la vitamina C, por eso es conveniente consumirlo crudo.
Ahora que ya conoces los beneficios del jengibre, seguro que lo incorporas a tu alimentación; nosotros hace tiempo que lo hemos hecho.